domingo, 23 de septiembre de 2012
Nuestro cuento preferido
Este es nuestro cuento preferido. Gracias a este cuento hemos vivido momentos divertidísimos.
Trabajando el nombre
A lo largo de esta semana jugaremos a escribir nuestro nombre en la PDI con este recurso:
http://www.cercifaf.org.pt/mosaico.edu/ca/magnetes_letras.html
A lo largo de estos días estamos trabajando el tema del colegio: recordando las dependencias, conociendo a los nuevos maestros, recordando el uso de algunos materiales de trabajo (punzón, ceras, témperas, pegamento...) y colaborando en las distintas rutinas.
Para que haya un buen clima en el aula hemos llegado a la conclusión de que son necesarias algunas normas, por lo que nos pusimos a pensar y estas son las que acordamos entre todos:
- Colgar las chaquetas.
- Recoger la cocinita, los coches y las construcciones.
- Levantar la mano.
- Pintar sin salirse.
- Hacer una bola de plasti al terminar de jugar.
- Silencio para leer libros.
- Estar callados cuando alguien habla.
- No pegar, no arañar.
- No pisar a las personas.
- Sentarse bien (aportación de la profe).
- No gritar cuando hablo con otra persona.
- Ponerse solos la chaqueta.
Para que haya un buen clima en el aula hemos llegado a la conclusión de que son necesarias algunas normas, por lo que nos pusimos a pensar y estas son las que acordamos entre todos:
- Colgar las chaquetas.
- Recoger la cocinita, los coches y las construcciones.
- Levantar la mano.
- Pintar sin salirse.
- Hacer una bola de plasti al terminar de jugar.
- Silencio para leer libros.
- Estar callados cuando alguien habla.
- No pegar, no arañar.
- No pisar a las personas.
- Sentarse bien (aportación de la profe).
- No gritar cuando hablo con otra persona.
- Ponerse solos la chaqueta.
lunes, 17 de septiembre de 2012
¡Bienvenidos a nuestro blog!
La mejor manera de comenzar esta aventura:
Educar es lo mismo
que poner motor a una barca...
hay que medir, pesar, equilibrar...
...y poner todo en marcha.
Para eso,
uno tiene que llevar en el alma
un poco de marino...
un poco de pirata...
un poco de poeta...
y un kilo y medio de paciencia
concentrada.
Pero es consolador soñar
mientras uno trabaja,
que ese barco, ese niño
irá muy lejos por el agua.
Soñar que ese navío
llevará nuestra carga de palabras
hacia los puertos distantes,
hacia islas lejanas.
Soñar que cuando un día
esté durmiendo nuestra propia barca,
en barcos nuevos seguirá
nuestra bandera
enarbolada.
Gabriel Celaya.
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